En la cultura de la controversia

Solo necesitas un árbol para hacer de una "nada", un algo.

Sé que ha pasado algún tiempo desde mi ultima entrada, pido disculpas en este momento. He estado en las etapas finales de la maestría y en atención a pacientes, lo que demanda tiempo. Adicional he empezado de algún modo poco pretencioso a ayudar a una amiga y colega en un proyecto hermoso de llevar terapia a unos adolescentes que mucho lo necesitan.

Por lo general he tratado de mantenerme al margen del vaivén social y político al que esta expuesto en estos momentos mi país, puesto a que siento (y esto es muy mio) que no me toca dar una opinión sobre el tema. Pero pensando algunas cosas en mi vida diaria, he visto un fenómeno tan abarcador en nuestra sociedad que pienso vale la pena llamarlo a esta tribuna y dilucidar.

A mi alrededor he visto que existe un sistema relacional basado en vínculos conflictivos, a niveles personales, micros y macros (entiéndase una comunidad de vecinos hasta una asamblea de diputados). Las personas son prontas a adquirir posturas defensivas y criticas a cualquier movimiento. Y es que es natural para el ser animal sentir una ansiedad (casi angustiosa en algunos casos) por la ruptura del status quo. El cambio trae consigo nuevas adaptaciones, nuevas emociones, y nuevas situaciones a enfrentar.

¿Pero cuando la critica a esto se vuelve aburrida y con una postura de demagogia?, pues siento que desde la postura más egocentrista del ser humano, por lo que vamos a perder irremediablemente.

Miren, hay una diferencia entre el ser individual y el ser egoísta. El primero piensa analiza y concluye lo que para su realidad le es más funcional, se identifica o en peor de los casos, soporta. El segundo es esta persona que trata de imponer esta realidad a los demás. Por ejemplo: En mi ser individual puedo entender que alguien que tiene la placa vencida de su auto puede ser producto de una situación económica familiar que no le permite hacer frente al costo de esta matricula. El ser egoísta haría lo que hace el Periodista Eduardo Limyuen de darle plomo a las personas que carecen de placa al día en un noticiero matutino a nivel nacional. Incluso me parece un abuso de poder de parte de esta persona. Y para que sepan, él esta funcionando en uno de los niveles más primarios de la moralidad de Kohlberg.

Lo peor del caso es que muchas de las personas que están en posiciones de poder en diferentes rubros de la sociedad están en esta postura egoísta y ensimismada botando su basura mental en los medios masivos y luego preguntando: ¿Por qué hay tanta delincuencia?
A ver, ¿Quién quisiera ser diputado en estos momentos? donde es la profesión más pública y peyorativa mente calificada en nuestra sociedad. Sin embargo, pautamos un sinnúmero de veces al día propaganda sobre la SUPER DUPER producción "El Cartel de los Sapos", incluso filmando una secuela de la cuestión.

A donde quiero llegar es que, si en las posiciones que mueven la sociedad, no hay personas sociales. ¿Qué pasará?. Si eres una persona en una posición de poder social, ¿Por qué harías algo positivo, si los medios de comunicación te criticarán de todas maneras?. Mientras tanto, si buscamos en todo el país, en la esquina, en las oficinas, en los hogares, veremos tantas cosas positivas. Tantas personas que desinteresadamente se ponen al servicio de otros de manera espiritual, mental, física o en variadas combinaciones.

Mira tu wall y ponte a ver cuantas personas mandan mensajes espirituales al día, ¿Crees qué es por molestar? ¿Qué prefieres que te manden, fotos de muertos en bahrein? Miren lo esperanzador y reparador en cada persona a su alrededor y empezaremos a sanar nuestras propias heridas a medida que nos veamos reflejados en los demás.

Por ultimo y como siempre, compartan y comenten!

El Gil